miércoles, 6 de noviembre de 2013

...algún día tendré que verme las caras con tú desvanecida imagen
para tener la certeza de que hubo respuestas que dejaste aparte
por el miedo a que tu propia contestación fuera una verdad ausente de desgaste.
En verdad todo aquel cariño solo fue la escusa para tapar a otro con un empaste,
pero aun sigo escribiéndote en mi cuaderno de mates versos en el margen
al que no le acaban de salir las cuentas de cuando me olvidaste...

...ella sabe que en su cuello está la curva más precisa de todas mis letras...

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